La ciudad combina a la perfección historia, encanto y riqueza cultural. Su arquitectura medieval bien conservada, sus románticos canales y su deliciosa gastronomía la convierten en una visita obligada para los viajeros que buscan una experiencia única y encantadora.

Caminar es sin duda la mejor manera de explorar Brujas. El centro histórico de la ciudad es compacto y de pequeñas dimensiones. Y a pie no te perderás nada. Explora las sinuosas calles, pasea por las majestuosas plazas, pasea por los canales, disfruta del panorama de la ciudad desde uno de sus numerosos puentes y deleita tus ojos.

La lengua oficial de Brujas es el neerlandés, también denominado Flamenco. No obstante sus habitantes se caracterizan por ser políglotas por lo que no es nada extraño encontrarse a gente que hable francés, alemán y sobre todo inglés.

En Bélgica, por lo tanto, también en Brujas, se paga en euros. El símbolo del euro es €. Las monedas son de 1, 2, 5, 10, 20 y 50 céntimos de euro y de 1 y 2 euros. Los billetes son de 5, 10, 20, 50, 100, 200 y 500 euros.

Si queremos sacarle el máximo partido a Brujas, los mejores meses para realizar una escapada son los de verano, cuando las temperaturas oscilan entre los 17 y los 20 grados.